La Habana, capital de Cuba, ha sido durante siglos una de las ciudades más visitadas del Caribe por sus múltiples atractivos. Tanto en la etapa de dominio estadounidense como tras la Revolución, la ciudad habanera ha sabido conservar su genuina identidad basada en el crisol de culturas africanas, taínas y españolas que se han encontrado su nexo de unión en esta Isla de belleza tropical.